F1
Toto Wolff recordó cómo fue atravesar los años en los que el equipo Mercedes de Fórmula 1 tuvo a Lewis Hamilton y a Nico Rosberg como compañeros de equipo y que más de una vez devino en un clima interno intenso de disputa.
Hamilton y Rosberg compartieron escudería en la Fórmula 1 desde el año 2013 hasta el 2016 cuando el piloto alemán tras ganar su campeonato mundial, decidió por retirarse de las carreras. Para él, ya había alcanzado lo que tanto había buscado.
En 2014 comenzó la era híbrida y allí, también, el dominio de Mercedes en la Fórmula 1. Pero, también, comenzaron a darse algunos chispazos. En una entrevista con el medio High Performance, Wolff, en primer lugar, dejó en claro: "No estoy seguro de que saque lo mejor de ambos, porque eso es negatividad, y aún tienes que ser un jugador de equipo".
El jefe de equipo de Mercedes lo intentó, pero aceptó que por ese entonces no pudo hacer mucho para calmar las cosas. "No pude cambiarlo, porque los pilotos fueron contratados antes de que yo llegara. Nadie pensó realmente ¿cuál es la dinámica entre los dos? ¿Cuál es el pasado entre los dos? Había mucho contexto histórico que ninguno de nosotros conocía, y que nunca conoceremos".
Las disputas en la pista muchas veces llegaron a puntos culminantes como la de Spa en 2014, o las que tuvieron lugar en Catalunya y Austria en la temporada 2016. Cruces que no solo perjudicaron a los pilotos, sino que también al equipo. “Fui capaz de crear un ambiente en el que tenían que respetar al equipo, a veces con puño de hierro, y entendieron que no podían defraudarnos, no podían defraudar a Mercedes", describió.
"En los acontecimientos de 2014, sentí que había un comportamiento egoísta. Dije que la próxima vez que se acerquen al otro coche, a tu compañero de equipo, piensen en la marca Mercedes. Piensen en los individuos del equipo", continuó Wolff.
Y para cerrar, rememoró: "Siempre dejé claro que si esto iba a ocurrir regularmente y había un patrón, no tendría miedo en hacer que alguien se pierda carreras".